martes, 13 de marzo de 2012

Los diamantes de Gould

Cuando una cosa lleva a la otra...



John nació de padre jardinero, y llegó con el pan bajo el brazo, porque luego de su nacimiento, papá fue nombrado capataz de los jardines reales de Windsor.
Su futuro era la horticultura...pero por esas cosas del destino, John terminó siendo un experto en taxidermia y sus habilidades lo llevaron a ser el primer conservador del museo de la Zoological Society of London en 1827.
¡Qué mejor lugar para estar en contacto con los mejores naturalistas de Inglaterra! ¡Qué oportunidad para ser el primero en ver las nuevas colecciones de aves que llegaban a la Sociedad!.
Por eso, cuando en 1830 llegó al museo una colección de aves del Himalaya no descritas con anterioridad, John publicó el libro A Century of Birds from the Himalayas cuyas ilustraciones eran litografías de su mujer, Elizabeth.

Cuando Charles Darwin presentó los especímenes de aves y mamíferos recogidos durante su viaje en el Beagle a la Geological Society of London, las aves fueron entregadas a John quien informó que las aves de las Islas Galápagos que Darwin pensaba que eran mirlos, picogordos y pinzones, eran en realidad "una serie de pinzones tan particulares como para formar un grupo enteramente nuevo, que contendría 12 especies".

La historia llegó a los periódicos.
En marzo Charles y John se encontraron de nuevo, descubriendo que el "chochín de Galápagos" de Darwin era en realidad otra especie de pinzón y que sus "mockingbirds" recogidos en cada isla eran en realidad especies separadas y no variaciones, con parientes en la Sudamérica continental.  

Posteriormente, John informó que el pequeño ñandú del sur que había sido salvado de la cena de Navidad era una especie nueva, con un territorio que se superponía parcialmente con el de los ñandúes del norte.

Darwin no se había molestado en etiquetar sus pinzones indicando la isla de procedencia, pero Robert FitzRoy y otros miembros de la expedición, sí. A partir de los distintos especímenes recogidos, John fue capaz de establecer que cada especie era única de ciertas islas, lo que supuso un importante paso en el desarrollo de la teoría de la evolución.

Luego, cuando John y Elizabeth fueron a Australia para estudiar las aves de ese país y ser los primeros en publicar un libro sobre el tema, fueron acompañados por el naturalista John Gilbert. 

El resultado de la aventura fue The Birds of Australia, libro en 7 tomos con 600 láminas del que se pueden ver varias imágenes... aquí .

328 de las especies eran nuevas para la ciencia y fueron bautizadas por Gould.
En 1844, John descubre al DIAMANTE DE GOULD, que bautiza Amadiva Gouldiae en honor a su esposa fallecida.

En realidad los tres primeros Diamantes de Gould capturados en el año 1833 por una expedición francesa, eran de cabeza roja. Originalmente, la nueva especie encontrada recibió el nombre de Poephila Mirabilis refiriéndose al comportamiento observado y a su belleza, Poe del griego hierba, phila amante de y Mirabilis del latín maravilloso. John Gould capturó varios pájaros similares al Poephila Mirabilis pero de cabeza negra y creyendo que era una nueva especie le dio el nombre de Amadiva Gouldiae, en honor a su esposa.

Más tarde se dieron cuenta de que se trataba de una única especie, y sin embargo hoy en día, ese pequeño diamante, sigue siendo conocido como Lady Gould.

Una cosa trae la otra...para mí.
En una reciente visita a Viedma, capital de Río Negro, encuentro en la casa de unos amigos...al diamante de Gould, en una pieza cercana a la calentita cocina.
Nunca había visto uno y ahí ... ¡¡¡ había varios !!!

Argentina tiene esas sorpresas ... y esos talentosos criadores.


1 comentario:

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